El tamaño de la mochila debe ser de las denominadas “de trekking” de un tamaño adecuado de entre los 60 a 90 litros, aunque todo depende de la actividad:
- De 18 a 30 litros: Para actividades de un solo día con poco material necesario.
 
- De 30 a 40 litros: Para actividades de un solo día con utilización de bastante material como alpinismo o escalada.
 
- De más de 40 litros: Para actividades de varios días y con gran carga de material.
 
¿Qué puede sernos de utilidad incluir en nuestra equipación?
- Bastón de trekking regulable con mango cómodo.
 
- Botella de 1,5 litros (o más según la duración prevista) de agua y alguna bebida isotónica.
 
- Protector solar de alto índice tanto para la piel, especial para la cara y para los labios.
 
- Gafas de sol con alto índice de protección.
 
- Una linterna de mano o Frontal (las pequeñas de leds son las más duraderas y cómodas).
 
- Pilas de repuestos bien envueltas si vas a zonas frías, ya que el frío las descarga.
 
- Comida de sobra (barritas energéticas, frutos secos y/o jugosos…).
 
- Gorra con protección para la nuca.
 
- Pañuelos de papel.
 
- Cordel para el móvil y el GPS.
 
- Un mechero y un pedernal.
 
- Navaja multiusos.
 
- Chubasquero fino plegable.
 
- Ropa de abrigo y/o térmica.
 
- Silbato.
 
- Bolsa de plástico (para ropa sucia, objetos húmedos o basura).
 
- El papel higiénico húmedo es una bendición.
 
- Pequeño botiquín en bolsa estanca. Un botiquín es muy personal, pero a modo de ejemplo podemos incluir:
 
– Un par de guantes estériles.
– Gasas.
– Pinzas.
– Tijeras pequeñas.
– Gel de glucosa.
– Tiritas y apósitos de distintos tamaños.
– Suero fisiológico en ampollas individuales.
– Antiséptico: Povidona yodada o clorhexidina.
– Pastillas para el mareo.
– Paracetamol.
– Ibuprofeno.
– Crema para golpes y contusiones tipo Flogoprofén.
– Pastillas antidiarréicas.
– Otra medicación personal que necesites.
	
